La fachada monocapa cada vez está más presente en las fincas y en los edificios de viviendas de las ciudades, ya que tiene una estupenda relación calidad-precio, aunque puede que no sea la más resistente y de ahí que la necesidad de reparar las grietas en una fachada monocapa sea bastante común.
Este tipo de revestimiento se ve afectado por el clima, los movimientos del edificio e incluso se puede estropear si en su momento no se aplicó correctamente, aunque, por suerte, reparar las grietas es algo bastante económico.
¿Qué es una fachada monocapa?
El revestimiento monocapa es muy similar al cemento, y, de hecho, en el pasado se usaba este material sin añadirle prácticamente nada. Ahora casi nunca se aplica solo, puesto que muy a menudo se le añaden algunos compuestos o aditivos con el fin de obtener unas mejores propiedades.
El Precio Metro Cuadrado Fachada Monocapa es su gran baza, y pese al nombre lo cierto es que suelen dar varias capas del material, poniendo una malla metálica o de plástico que le aporta mayor resistencia al paso del tiempo.
Por qué se deterioran estas fachadas
Hay varias razones por las que aparecen las grietas en el revestimiento y estas son de diversos tipos. Las hay muy delgadas y abundantes, otras que recorren una gran parte de la fachada, también las vemos más pequeñas y anchas, y en los casos más graves se caen trozos de material, dejando zonas descubiertas.
Movimientos estructurales de los edificios
Los edificios son elementos “vivos” y es normal que haya cierto movimiento en su estructura, pero la aparición de grietas es algo que hace conveniente una revisión por parte de un especialista.
Cuando su origen viene de un movimiento de la estructura, vemos que aparecen en primer lugar en el soporte y se abren paso hasta el revestimiento monocapa.
Antes de arreglarlas hay que asegurarse de que el problema del edificio se ha solucionado, pues de lo contrario volverán a aparecer. En estos casos se aconseja la colocación de “testigos” para verificar que el movimiento ha cesado antes de proceder a su reparación.
Retracción del revestimiento
Si las fisuras son numerosas y vemos que se distribuyen por la fachada de una manera regular, la causa suele ser la retracción del revestimiento cuando se endureció.
Esto ocurre porque en su momento no se aplicó correctamente, empleando demasiada agua, no poniendo suficiente cemento, por una deshidratación rápida por el calor, etc.
Por heterogeneidad del soporte
Siempre que hay puntos de unión entre la fachada y algunos elementos de la construcción hay que colocar mallas de refuerzo, pues de lo contrario la aparición de grietas es solo cuestión de tiempo.
Las podemos ver en la zona en la que los pilares se encuentran con las paredes, donde se junta el soporte con las cajas de las persianas, etc.
¿Cómo reparar grietas en una fachada monocapa?
Por suerte, no es complicado reparar grietas en una fachada monocapa y tampoco es caro en la mayoría de los casos, a no ser que estén extendidas por toda la envolvente.
Eso sí, siempre hay que recordar que si se deben a problemas estructurales hay que esperar a que estos se solucionen, pues de lo contrario la reparación no servirá para nada.
Se comienza saneando bien la zona
Todas las zonas afectadas tienen que sanearse a fondo, lo que significa coger un martillo, un cincel e ir picando para retirar todas las partes del revestimiento que están sueltas alrededor de la grieta.
Aquí conviene ser generosos, y es mejor pasarse saneando que quedarse cortos, ya que una vez que se empieza el trabajo retirar un poco más de mortero no es un problema, pues apenas influirá en el precio final.
Cubrimos con un mortero de calidad
Cuando toda la zona de la grieta y sus alrededores se ha saneado, de manera que tenemos el revestimiento bien pegado a la pared, comenzamos a aplicar un mortero de calidad, siempre siguiendo las instrucciones del fabricante.
Debemos hacerlo así, pues una de las causas más frecuentes de que aparezcan las grietas en la fachada monocapa es que el revestimiento no se ha aplicado de una manera correcta.
La forma de tapar la grieta es la que hará que la reparación sea un éxito y hay que comenzar con una capa muy fina, y, sin dejar que se seque, colocar una malla de plástico que es la más indicada, pues es más maleable que la metálica y no se oxida, por lo que no va a estropear la reparación en el futuro.
Con la malla ya puesta, se pone una capa de mortero más gruesa, la necesaria para rellenar llenar el hueco restante.
Se hidrata la zona y se iguala con el resto de la pared.
Es imprescindible lavar el parche con una esponja y agua, pues si dejamos que se seque demasiado deprisa se agrietará otra vez, así que conforme vaya secando le aplicamos la esponja.
Mientras el mortero es maleable hay que igualarlo con el resto de la pared y hacer todo lo necesario para eliminar los defectos, con la idea que la reparación se note lo menos posible.
Reparar las grietas de una fachada monocapa no es complicado si se sanea la zona y el mortero se aplica de forma adecuada. Si en tu edificio han comenzado a aparecer, contacta con Realider, ya que somos profesionales de las fachadas monocapa y te podremos ayudar.