Estar al tanto de todo lo relacionado con el desprendimiento de fachada y sus elementos, y cómo protegerse frente a este riesgo, es especialmente importante para evitar accidentes que podrían llegar a ser mortales en los casos más graves.
La rehabilitación de edificios es totalmente necesaria para garantizar la integridad y seguridad de los mismos, pero la realización de las obras da lugar a un riesgo de desprendimiento que hay que intentar minimizar todo lo posible. Por otro lado, si no se acomete la rehabilitación, el edificio se va degradando con el paso del tiempo y el riesgo de desprendimiento también estará presente en este caso.
¿Cómo protegerse de un desprendimiento de fachada y sus elementos?
Cada vez es más común que los edificios cuenten con revestimientos exteriores que se suelen elegir siguiendo criterios estéticos. Ese revestimiento que en un principio es tan bonito, con el paso del tiempo se va degradando y, como es un añadido a la fachada, puede desprenderse y caer a la vía pública.
Esta circunstancia es más habitual en las fachadas de aplacados, pero lo cierto es que el desprendimiento puede darse con respecto a cualquier elemento que esté en el exterior del edificio.
Aunque el desprendimiento se produce de manera espontánea, estamos ante un riesgo que se puede prevenir. Porque la caída de los elementos de la fachada tiene, principalmente, una razón de ser: la falta de mantenimiento. Es cierto que en edificios relativamente nuevos también puede haber desprendimientos, pero en estos casos el problema está más relacionado con un defecto en el material o con una incorrecta instalación, algo que suele ser poco frecuente.
Por tanto, la mejor manera de protegerse frente a los desprendimientos de fachada y sus elementos es haciendo un buen mantenimiento del edificio. Y mucho mejor si este se aborda antes de que el riesgo de caída de objetos a la vía pública se haya materializado.
Por otro lado, al ejecutar la obra de mantenimiento, es imprescindible adoptar medidas de precaución para que no sean los propios trabajos que se están realizando sobre la fachada los que puedan causar la caída al suelo de elementos de la misma.
Qué hacer cuando cae material de la fachada a la vía pública
Lo primero que hay que hacer es prevenir que esto vuelva a suceder. Como responsable del edificio, la comunidad de vecinos debe adoptar medidas preventivas que pueden consistir en la instalación de redes o mallas en las zonas en las que existe ese riesgo de desprendimiento.
Si el material que se ha desprendido ha causado un daño físico o material, entonces hay que dar parte al seguro de la comunidad para que este asuma la responsabilidad civil que corresponda.
En algunos casos, será necesario recabar la asistencia de los bomberos para que revisen la fachada y se encarguen de eliminar aquellos elementos que tienen un mayor riesgo de caída inmediata. Esta intervención externa puede producirse por iniciativa de la comunidad de vecinos, pero también si un vecino, o un tercero ajeno a la finca, decide contactar con los bomberos para que revisen la fachada.
Un aspecto importante a tener en cuenta es que, si intervienen los bomberos, estos van a dar parte al ayuntamiento, y se iniciará un expediente que obligará a la comunidad a adoptar medidas de protección si no lo hubiera hecho ya, y a arreglar los daños que hay en la fachada.
Haya o no expediente administrativo, la comunidad de vecinos tiene que tomar medidas preventivas y arreglar las deficiencias de la fachada. La diferencia es que, si hay expediente administrativo, se concederá un plazo para llevar a cabo las actuaciones y, si este no se cumple, se impondrá una sanción económica a la comunidad de propietarios.
Qué puede pasar si no se adoptan medidas después de la caída de material a la vía pública
La caída de material a la vía pública nos está indicando que hay problemas en la fachada. Tal vez el desprendimiento sea algo puntual y no vuelva a suceder, pero existe el riesgo de que haya un daño importante que no se ve a simple vista y que podría causar nuevos desprendimientos. Por eso, siempre hay que tomar medidas preventivas.
Si se opta por no hacer nada, y se produce un nuevo desprendimiento, el seguro de la comunidad de propietarios ya no responderá de la indemnización por responsabilidad civil. Es decir, que será la comunidad la que tenga que hacer frente con sus propios recursos al pago de las indemnizaciones que puedan exigir quienes hayan resultado dañados por la caída de objetos.
Tipos de sistemas de protección colectivos
Viseras o cartolas
Este sistema se instala habitualmente en la primera planta del edificio que se está rehabilitando. En caso de que se produzca un desprendimiento, el material caerá sobre la visera y no llegará a la calle.
Ménsulas
Las ménsulas son soportes que se colocan a modo de fijación en otros elementos de protección colectivos como las viseras o los andamios. Las estructuras auxiliares que están sujetas por ménsulas sobresalen de la fachada, pero se encargan de que los desprendimientos no lleguen en ningún caso a la vía pública.
Bañeras
Las bañeras de plástico tienen la función de recoger elementos que caigan desde la parte superior de la fachada.
Redes de seguridad
Se colocan en todo el perímetro de la fachada en el que se va a trabajar. Su misión es evitar que los trozos desprendidos de la fachada puedan caer al suelo. Las redes se encargan de llevar los elementos caídos hasta la zona en la que se encuentran las viseras o las bañeras.
El desprendimiento de facha y sus elementos es un problema que hay que tratar rápido y de la mejor manera posible. Si necesitas profesionales para la rehabilitación de tu edificio, ponte en contacto con nosotros y te ayudaremos.